Vecinos y comerciantes de la carrera 21 entre calles 28 y 29 cumplen más de 36 días sin servicio eléctrico tras la explosión de un transformador el pasado 10 de agosto, que dejó sin energía a seis locales comerciales y ocho apartamentos.
La comunidad denuncia que, pese a múltiples reportes a Corpoelec, no han recibido solución. Los técnicos retiraron los tres transformadores dañados pero no instalaron nuevos equipos, lo que ha dejado a la zona totalmente a oscuras en las noches.
Los habitantes aseguran que la situación es insostenible, afectando la salud de niños, adultos mayores y personas con discapacidad, además de causar pérdidas económicas en negocios que permanecen cerrados o dependen de plantas eléctricas, generando conflictos vecinales por el ruido constante.
Los afectados exigen a las autoridades la restitución inmediata del servicio eléctrico para evitar mayores daños, riesgos de seguridad y la paralización total de la actividad comercial en esta concurrida zona de la ciudad.
Notilara